SALVEMOS A ORLANDO!!
Por William J. Diaz
Cualquier persona que lea nuestro titular de esta semana podria pensar que algun amigo o familiar llamado Orlando esta sufriendo algun peligro y que requiere de nuestro auxilio para evitarle un colapso que pudiera ser mortal.
Sin embargo, nos referimos a nuestra ciudad bella, pero que segun la apreciacion anterior, se trata de una metropoli habitada y conducida por humanos.
Orlando, es una ciudad que ha experimentado uno de los crecimientos mas explosivos que haya evidenciado region alguna en todo el pais en cualquier epoca. Aun tengo fresco el recuerdo de cuando a fines de los 80’s se exigia el pago de un "cargo extra por uso" para todos aquellos que al mudarse a esta region registraban un vehiculo original de otro estado. Es decir al matricular un automovil con tablilla o placa de otro estado se cobraba un "impact fee" que luego de una larga disputa legal fue declarado ilegal o no constitucional, por lo que se procedio a la devolucion correspondiente a quienes asi lo pagamos. El hecho es que con altos y bajos hace ya decadas que Orlando viene experimentando ese crecimiento casi irracional, con sus grandes ventajas y sus tambien desventajas.
Esta vez quiero destacar mas las desventajas, por cuanto ellas nos podrian impedir en un momento dado el poder planificar un mejor ambiente y ademas porque se podria convertir en una bola de nieve que luego seria tarde para enderezar o evitar una anarquia urbanistica, social, comercial y comunicacional.
Los altos volumenes en el transito que desde hace cierto tiempo venimos observando, unido a la conducta de muchos conductores y conductoras, estan reflejando una preocupante senal en esa direccion.
Casi a diario comenzamos a observar como va en descenso la cortesia que caracterizaba a nuestros choferes, el respeto por la luz amarilla se comienza a perder, los cambios violentos de carril o canal ya son el pan nuestro de cada dia y los ruidos estrepitosos con musica altisonante o equipos resonadores en los motores han invadido las casi totalidad de nuestras calles y avenidas.
Entiendo que las ciudades como cualquier el ser humano, crecen y progresan y que es una condicion natural, pero tambien es cierto que podemos orientar el crecimiento de esos seres, de nuestros hijos, de nuestras familias y por ende tambien de nuestras ciudades. No olvidemos aquella maxima de que la familia es la celula matriz de la sociedad.
No se a quien corresponde dentro de el organigrama sociopolitico de la ciudad o del condado, pero si se que algo debe hacerse. Y debe hacerse con el concurso de todos, con el apoyo de todos. El gobierno local solo no puede hacerlo, pero si puede organizar un equipo o una comision que se avoque a buscar soluciones a desarrollar una campana institucional para humanizar o para impedir que Orlando se deshumanize.
Sera muy triste que pequemos por omision y que el dia del manana solo nos quede el recuerdo de como era la ciudad. O que nos pase como al cientifico en el caso de Frankstein, que crearon su mostro y despues no encontraron como controlarlo.
Estamos a tiempo, pero hay que tener la voluntad de hacerlo. Hay una cantidad de organizaciones y de pseudodirigentes que pudiesen dedicarse con el Alcalde, el Presidente del Condado o los condados y las diferentes ciudades que integran el area metropolitana de Orlando a considerar este problema. Con la ayuda de los medios de comunicacion, adelantar una campana institucional para rescatar la cordialidad y la bondad de nosotros los moradores de esta ciudad. Me ofrezco a colaborar.
Ya casi que nos faltan los vendedores ambulantes en las esquinas, los insultos de carro a carro por cualquier tonteria en el transito para parecernos a Miami, Nueva York o Los Angeles, o cualquier capital latinoamericana. Por lo demas, hoy ya cuesta que disfrutemos de la cortesia al ceder el paso a cualquier conductor que este tratando de cruzar una arteria vial, aun en situaciones de trafico estacionario por luz roja o de transito lento. El abuso de los telefonos celulares ha contribuido con esta distraccion ademas de ayudarnos a vivir en consecuencia una vida mas acelerada. Bloquear las intersecciones ya es algo rutinario aqui. Ponemos la mirada recta, sin voltear, pero, casi disfrutando el haber entorpecido el paso de nuestros semejantes.
Algo tenemos que hacer, tenemos que salvar nuestra ciudad, debemos rescatar la simpatia, cortesia y amabilidad al conducir. Hay que empezar por dejar de ver a los otros conductores como si fueran rivales a quienes debemos vencer. No, son nuestros amigos y como tales debemos verlos. Tratemos por Dios, de ser mas amables y comprensivos y hagamos mas dulce nuestro transitar por las calles que en el pasado fueron vias de placer y encanto. Es que acaso cuesta mucho ser cordial? Es que vamos a perder un gran negocio o una cita amorosa, si cedemos el paso a alguien que esta esperando por un conductor generoso? Seamos inteligentes. Demostremos a propios y extranos que estamos orgullosos de nuestra ciudad. Que nuestros conductores son eso; conductores de sonrisas y amabilidad.
Queridos lectores, Orlando esta en terapia. !Salvemos a Orlando! El es de todos.
Hasta la proxima.
Cualquier persona que lea nuestro titular de esta semana podria pensar que algun amigo o familiar llamado Orlando esta sufriendo algun peligro y que requiere de nuestro auxilio para evitarle un colapso que pudiera ser mortal.
Sin embargo, nos referimos a nuestra ciudad bella, pero que segun la apreciacion anterior, se trata de una metropoli habitada y conducida por humanos.
Orlando, es una ciudad que ha experimentado uno de los crecimientos mas explosivos que haya evidenciado region alguna en todo el pais en cualquier epoca. Aun tengo fresco el recuerdo de cuando a fines de los 80’s se exigia el pago de un "cargo extra por uso" para todos aquellos que al mudarse a esta region registraban un vehiculo original de otro estado. Es decir al matricular un automovil con tablilla o placa de otro estado se cobraba un "impact fee" que luego de una larga disputa legal fue declarado ilegal o no constitucional, por lo que se procedio a la devolucion correspondiente a quienes asi lo pagamos. El hecho es que con altos y bajos hace ya decadas que Orlando viene experimentando ese crecimiento casi irracional, con sus grandes ventajas y sus tambien desventajas.
Esta vez quiero destacar mas las desventajas, por cuanto ellas nos podrian impedir en un momento dado el poder planificar un mejor ambiente y ademas porque se podria convertir en una bola de nieve que luego seria tarde para enderezar o evitar una anarquia urbanistica, social, comercial y comunicacional.
Los altos volumenes en el transito que desde hace cierto tiempo venimos observando, unido a la conducta de muchos conductores y conductoras, estan reflejando una preocupante senal en esa direccion.
Casi a diario comenzamos a observar como va en descenso la cortesia que caracterizaba a nuestros choferes, el respeto por la luz amarilla se comienza a perder, los cambios violentos de carril o canal ya son el pan nuestro de cada dia y los ruidos estrepitosos con musica altisonante o equipos resonadores en los motores han invadido las casi totalidad de nuestras calles y avenidas.
Entiendo que las ciudades como cualquier el ser humano, crecen y progresan y que es una condicion natural, pero tambien es cierto que podemos orientar el crecimiento de esos seres, de nuestros hijos, de nuestras familias y por ende tambien de nuestras ciudades. No olvidemos aquella maxima de que la familia es la celula matriz de la sociedad.
No se a quien corresponde dentro de el organigrama sociopolitico de la ciudad o del condado, pero si se que algo debe hacerse. Y debe hacerse con el concurso de todos, con el apoyo de todos. El gobierno local solo no puede hacerlo, pero si puede organizar un equipo o una comision que se avoque a buscar soluciones a desarrollar una campana institucional para humanizar o para impedir que Orlando se deshumanize.
Sera muy triste que pequemos por omision y que el dia del manana solo nos quede el recuerdo de como era la ciudad. O que nos pase como al cientifico en el caso de Frankstein, que crearon su mostro y despues no encontraron como controlarlo.
Estamos a tiempo, pero hay que tener la voluntad de hacerlo. Hay una cantidad de organizaciones y de pseudodirigentes que pudiesen dedicarse con el Alcalde, el Presidente del Condado o los condados y las diferentes ciudades que integran el area metropolitana de Orlando a considerar este problema. Con la ayuda de los medios de comunicacion, adelantar una campana institucional para rescatar la cordialidad y la bondad de nosotros los moradores de esta ciudad. Me ofrezco a colaborar.
Ya casi que nos faltan los vendedores ambulantes en las esquinas, los insultos de carro a carro por cualquier tonteria en el transito para parecernos a Miami, Nueva York o Los Angeles, o cualquier capital latinoamericana. Por lo demas, hoy ya cuesta que disfrutemos de la cortesia al ceder el paso a cualquier conductor que este tratando de cruzar una arteria vial, aun en situaciones de trafico estacionario por luz roja o de transito lento. El abuso de los telefonos celulares ha contribuido con esta distraccion ademas de ayudarnos a vivir en consecuencia una vida mas acelerada. Bloquear las intersecciones ya es algo rutinario aqui. Ponemos la mirada recta, sin voltear, pero, casi disfrutando el haber entorpecido el paso de nuestros semejantes.
Algo tenemos que hacer, tenemos que salvar nuestra ciudad, debemos rescatar la simpatia, cortesia y amabilidad al conducir. Hay que empezar por dejar de ver a los otros conductores como si fueran rivales a quienes debemos vencer. No, son nuestros amigos y como tales debemos verlos. Tratemos por Dios, de ser mas amables y comprensivos y hagamos mas dulce nuestro transitar por las calles que en el pasado fueron vias de placer y encanto. Es que acaso cuesta mucho ser cordial? Es que vamos a perder un gran negocio o una cita amorosa, si cedemos el paso a alguien que esta esperando por un conductor generoso? Seamos inteligentes. Demostremos a propios y extranos que estamos orgullosos de nuestra ciudad. Que nuestros conductores son eso; conductores de sonrisas y amabilidad.
Queridos lectores, Orlando esta en terapia. !Salvemos a Orlando! El es de todos.
Hasta la proxima.
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